Habló Nabucodonosor, y les dijo: ¿Fué de propósito, oh Sadrac, Mesac y Abed-nego? ¿a mis dioses no daréis culto, ni adoraréis la imagen de oro que yo he hecho levantar?
¡PÓSTRASE Bel, Nebo se abate! sus imágenes están puestas sobre bestias de carga, y sobre el ganado; esas cosas que vosotros solíais llevar, son alzadas, cual carga, sobre las bestias cansadas.
¡Publicad entre las naciones! ¡haced proclamación! ¡alzad la señal! ¡haced proclamación! ¡no lo encubráis! decid: ¡Tomada ha sido Babilonia! ¡Bel está avergonzado, Merodac aterrado! ¡sus imágenes están avergonzadas, sus ídolos aterrados!
EL rey Nabucodonosor hizo una imagen de oro, cuya altura era de sesenta codos, y su anchura de seis codos; la hizo levantar en la llanura de Dura, en la provincia de Babilonia.
Mas al fin vino delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, conforme al nombre de mi dios, y en quien esta el espíritu de los santos dioses; y referí mi sueño delante de él, diciendo: