Y aquel que estaba sentado en él habló al varón vestido de lino blanco, diciendo: Entra en medio de las ruedas, por debajo del querubín, y llena tus manos de ascuas de fuego de en medio de los querubines, y espárcelas sobre la ciudad. Y él entró delante de mi vista.
Entonces extendió el querubín su mano de en medio de los querubines, al fuego que estaba en medio de los querubines, y tomó de él, y lo puso en las manos del que estaba vestido de lino blanco; el cual lo tomó, y salió.
Si alguno lleva en cautiverio, al cautiverio irá; si alguno mata con espada, es preciso que él sea muerto a espada. En esto está la paciencia y la fe de los santos.
él también beberá del vino de la ira de Dios, que está preparado sin mezcla alguna en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre, en la presencia de los santos ángeles, y en la presencia del Cordero:
Y otro ángel salió de junto al altar, el cual tenía poder sobre el fuego; y clamó a gran voz a aquel que tenía la hoz aguda, diciendo: ¡Echa tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la viña de la tierra, porque sus uvas están maduras!
porque verdaderos y justos son sus juicios; porque él ha juzgado a la gran ramera, la cual ha corrompido la tierra con su fornicación; y de manos de ella ha tomado venganza de la sangre de sus siervos!
¶Y cuando abrió el quinto sello, ví debajo del altar las almas de los que habían sido muertos a causa de la palabra de Dios, y a causa del testimonio que mantenían: