Con lo cual dijo Micaya: Por lo mismo, oye tú el oráculo de Jehová: Yo ví a Jehová sentado sobre su trono, y a todos los ejércitos celestiales que estaban al rededor de él, a su diestra y a su siniestra.
Hay linaje cuyos dientes son espadas, y sus muelas cuchillos, para consumir a los pobres de sobre la tierra, y a los menesterosos de entre los hombres.
¶Entonces el profeta Jeremías dijo a Hananías profeta: ¡Ruégote escuches, oh Hananías! Jehová no te ha enviado, sino que tú haces que este pueblo confíe en la mentira.
Admiten cohecho en ti para derramar sangre: has tomado usura y ganancia, y has robado a tus vecinos por medio de extorsión; y te has olvidado de mí, dice Jehová el Señor.
Por tanto, puesto que holláis al débil, y le tomáis donativos de trigo; aunque edifiquéis casas de piedra labrada, no habitaréis en ellas; aunque plantéis viñas deleitosas, no beberéis vino de ellas.
Porque yo sé cuán numerosas son vuestras transgresiones, y cuán agravados vuestros pecados, vosotros que sois adversarios al justo, y tomáis cohecho, y a los menesterosos los apartáis de su derecho ante los tribunales.
Asimismo codician campos, y se apoderan de ellos; casas también, y se alzan con ellas; así oprimen con fraude a uno, y le quitan su casa; a otro, y le arrebatan la herencia.
los que también coméis la carne de mi pueblo, despojándoles de su piel, y rompiendo sus huesos, y cortándolos en trozos, como si fuese para la olla, y como la carne que se echa dentro de la caldera?
¶Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos contra los hombres; pues vosotros no entráis, ni dejáis entrar a los que van entrando.