Y él me dijo: ¿Qué es lo que ves, Amós? Y respondí: Un canasto de frutas de verano. Entonces Jehová me dijo: Ha llegado el fin de mi pueblo Israel; ya no le pasaré más por alto.
Y dijo Dios a Noé: El fin de toda carne ha llegado delante de mí; porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos, y he aquí que voy a destruirlos juntamente con la tierra.
y la caduca flor de su hermosura gloriosa, la cual está sobre la cabeza del valle feracísimo, vendrá a ser como la breva temprana, antes del verano, que en viéndola el que la mira, apenas la tiene en su mano, la traga.
Y en cuanto a mí, he aquí que yo me quedaré en Mizpa, para presentarme delante de los Caldeos que vinieren a nosotros: mas en cuanto a vosotros, recoged la vendimia, y los frutos de verano, y el aceite, y ponedlos en vuestras tinajas; y habitad en las ciudades que habéis tomado en posesión.
TSADE.- ¡Los enemigos cazaban nuestros pasos, de modo que no podíamos transitar por las calles: cercano está nuestro fin, cumplidos son nuestros días; porque ya ha llegado nuestro fin!
Por tanto diles: Ya hago cesar este refrán, para que no se use más este refrán en Israel. Al contrario, diles: Han llegado los días, y el efecto de cada visión;
La casa de Israel empero no querrá escucharte a ti, porque no quieren escucharme a mí; porque toda la casa de Israel son de frente dura, y obstinados de corazón.
Entonces él me dijo: ¿Has visto, oh hijo del hombre, lo que los ancianos de la casa de Israel están haciendo en las tinieblas, cada uno en sus cámaras pintadas de imágenes? porque dicen: ¡Jehová no nos ve! ¡Jehová ha abandonado la tierra!
Entonces me dijo: ¿Has visto esto, oh hijo del hombre? ¿Es acaso cosa liviana para la casa de Judá el hacer las abominaciones que cometen aquí? pues han llenado la tierra de violencia, y luego se vuelven para provocarme a ira: y ¡he allí, cómo aplican el ramillete a la nariz!
Entonces él me dijo: Hijo del hombre, ¿has visto lo que ellos están haciendo? Grandes son las abominaciones que la casa de Israel aquí hace, a fin de que yo me aleje de mi Santuario. Pero vuélvete aún, y verás abominaciones más grandes que éstas.
Han llegado ya los días de visitación, han llegado los días de retribución; (los conocerá Israel, el cual dice: ¡El profeta es un insensato, el hombre inspirado está loco!) a causa de la muchedumbre de tu iniquidad, y por ser grande tu rencor.
Y Jehová me dijo: ¿Qué es lo que ves, Amós? A lo que respondí: Una plomada. Y dijo el Señor: He aquí que yo aplicaré la plomada en medio de mi pueblo Israel; ya no le pasaré más por alto.
¡AY de mí, dice Sión, porque estoy como cuando se han recogido las frutas de verano, como cuando se ha rebuscado la vendimia; no hay ya racimo que comer; desea mi alma los higos tempranos!