ESTAS son las postreras palabras de David: Dice David hijo de Isaí, y dice el varón levantado en alto, el ungido del Dios de Jacob, el dulce salmista de Israel:
¶Y les dijo: Éstas son mis palabras, que os hablé, estando todavía con vosotros, que era necesario que se cumpliese todo lo que está escrito de mí en la Ley de Moisés, y en los Profetas, y en los Salmos.
Habite ricamente en vosotros la palabra de Cristo, con toda sabiduría; enseñandoos y amonestándoos los unos a los otros, con salmos e himnos y cánticos espirituales, cantando con gracia en vuestros corazones a Dios.
¶Y era David hijo de aquel efrateo de Bet-lehem de Judá, que se llamaba Isaí, el cual tenía ocho hijos; y aquel hombre, en tiempo de Saúl, era viejo, de edad provecta entre los hombres.
¡Jehová, --serán desbaratados los que contiendan con él! desde los cielos tronará sobre ellos. Jehová juzgará los fines de la tierra; dará también fortaleza a su Rey, y ensalzará el cuerno de su Ungido.