¶Entonces marchó el rey con sus hombres a Jerusalem, contra los Jebuseos, que habitaban en aquella tierra; los cuales hablaron a David, diciendo: ¡Tú no entrarás acá sino cuando quitares a los ciegos y los cojos! (a quienes pusieron en contra suya): queriendo decir: ¡David no podrá entrar acá!