Y mandó el rey a Joab y a Abisai y a Itai, diciendo: ¡Tratad con indulgencia, por mi causa, al joven Absalom! Y todo el pueblo oyó cuando el rey mandó a todos los jefes acerca de Absalom.
Y dijo David a Abisai y a todos sus siervos: He aquí que mi mismo hijo, que salió de mis entrañas, va buscando mi vida; ¿pues qué mucho que lo haga así ahora este benjamita? Déjale que siga maldiciendo; porque se lo ha dicho Jehová.
¶A lo cual dijeron Absalom y todos los hombres de Israel: Mejor es el consejo de Cusai arquita que el consejo de Ahitofel: (porque Jehová había determinado frustrar el acertado consejo de Ahitofel, a fin de traer Jehová el mal sobre Absalom).
Mas aquel hombre contestó a Joab: Aunque se pesaran en mi mano mil siclos de plata, no extendería mi mano contra el hijo del rey; porque, oyéndolo nosotros, os mandó el rey a ti y a Abisai y a Itai, diciendo: ¡Guardaos, quienquiera que sea, respecto del joven Absalom!