Pasaron empero muchos días; y había ya muerto la hija de Sua, mujer de Judá, y habíase consolado Judá; y subía a ver los esquiladores de sus ovejas, él y su amigo Hira adullamita, a Timnat,
¶Y aconteció que a los dos años cumplidos, Absalom hacía el esquileo de sus ovejas en Baal-hazor, que está junto a Efraim; y Absalom convidó a todos los hijos del rey.
Los dichos de su boca son más blandos que manteca; pero hay guerra en su corazón: sus palabras son más suaves que el aceite; mas ellas son espadas desenvainadas.
Ahora pues he oído decir que haces el esquileo de tus ovejas. Ahora bien, cuando tus pastores estaban con nosotros, no les tratamos mal, y ellos no echaron menos cosa alguna todo el tiempo que estuvieron en el Carmelo.