Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré acaso hacerle volver otra vez? Yo iré a él, mas él no volverá a mí.
Y levantáronse todos sus hijos y todas sus hijas para consolarle; mas él no quiso ser consolado, diciendo: ¡Porque descenderé a mi hijo lamentándome hasta la sepultura! De este modo le lloraba su padre.
Yo sigo el camino de toda la tierra; ten fortaleza pues, y muéstrate hombre.
antes que me vaya (para nunca más volver), a tierra de tinieblas y de sombra de muerte,
Porque yo sé que me traerás a la muerte, y a la casa señalada para todos los vivientes.
Y Jesús le respondió: En verdad te digo, que hoy estarás conmigo en el Paraíso.