De lo cual avisaron a David, diciendo: No ha descendido Urías a su casa. David entonces dijo a Urías: ¿No acabas de llegar de viaje? ¿por qué pues no descendiste a tu casa?
y le convidó David a comer y beber con él; y le hizo emborrachar; mas a la noche él salió para acostarse en su cama con los siervos de su señor; y no descendió a su casa.
E hizo el rey Roboam en lugar de ellos escudos de bronce, y los depositó en manos de los capitanes de la guardia real, que guardaban la puerta de la casa del rey.