Mas cuando yo ví que no andaban derechamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Cefas en presencia de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles, y no como los judíos, ¿cómo obligas a los gentiles a judaizar?
escogidos conforme a la presciencia de Dios Padre, en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.
A LOS ancianos, pues, que están entre vosotros, les exhorto, yo que soy anciano juntamente con ellos, y testigo de los padecimientos de Cristo, siendo también participante de la gloria que ha de ser revelada:
Y ahora ruégote, señora, no como si te escribiera algún mandamiento nuevo, sino aquel mismo que hemos tenido desde el principio, que nos amemos los unos a los otros.