Pues en verdad admitió nuestro ruego; mas siendo de suyo muy solícito, de su propia voluntad partió para vosotros.
De manera que hemos rogado a Tito, que puesto que él había antes comenzado, asimismo diese cima, en vosotros, a esta gracia también.
¶Y os exhorto, hermanos, que admitáis la palabra de exhortación; porque os he escrito brevemente.
Y en ello doy mi opinión; puesto que esto os conviene a vosotros, que comenzasteis antes de los macedonios, no solo a hacer, sino a quererlo hacer, el año pasado.
No hablo como quien manda, sino a causa de la diligencia de otros, y para probar la sinceridad de vuestro amor.
Rogué a Tito ir a veros, y envié al hermano con él. ¿Acaso os explotó Tito? ¿No anduvimos en el mismo espíritu? ¿no anduvimos en unas mismas pisadas?