Y cuando vieron los hombres de Asdod que era así, decían: ¡No quede entre nosotros el Arca del Dios de Israel; porque su mano es dura sobre nosotros y sobre Dagón nuestro dios!
porque por no haberla llevado vosotros desde un principio, Jehová nuestro Dios estalló en ira contra nosotros; porque no le buscábamos conforme al orden prescrito.
¶Y los siervos de Faraón le dijeron: ¿Hasta cuándo ha de sernos este hombre un lazo? deja que vayan esos hombres y sirvan a Jehová su Dios. ¿Acaso no sabes tú todavía que Egipto está ya destruído?
Entonces Faraón llamó a Moisés y a Aarón, y dijo: Suplicad a Jehová que aparte las ranas de mí y de mi pueblo; y yo enviaré el pueblo para que, ofrezca sacrificio a Jehová.
Dice Jehová de los Ejércitos, el Dios de Israel: He aquí que yo castigaré a Amón: dios de No, a Faraón también, y a Egipto, y a sus dioses, y a sus reyes; en fin, a Faraón y a los que confían en él.
Por cuanto has puesto tu confianza en tus haciendas y en tus tesoros, tú también serás tomada; y Cemos irá en cautiverio, juntamente con sus sacerdotes y sus príncipes.
¡Ay de nosotros! ¿Quién nos librará de mano de estos poderosos dioses? Éstos son aquellos dioses que hirieron a Egipto con toda suerte de plagas en el desierto.
Enviaron pues y reunieron a sí todos los príncipes de los Filisteos, y decían: ¿Qué haremos del Arca del Dios de Israel? Y ellos respondieron: Llévese el Arca del Dios de Israel en torno hasta Gat. Llevaron pues el Arca del Dios de Israel en torno hasta allá.