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Referencias Cruzadas

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1 Samuel 26:21

Biblia Version Moderna (1929)

A lo cual respondió Saúl: ¡Yo he pecado! Vuelve, hijo mío, David; que ya no más te haré mal; por lo mismo que fué preciosa mi vida en tus ojos hoy. He aquí que yo he obrado locamente y he errado muy gravemente.

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16 Referencias Cruzadas  

Entonces el rey volvió a enviar un tercer capitán de cincuenta hombres con sus cincuenta. Mas subió el tercer capitán de cincuenta, y llegado que hubo, hincóse de rodillas ante Elías, y rogóle les tuviese piedad, diciéndole: ¡Oh varón de Dios, ruégote que mi vida, y la vida de estos tus cincuenta siervos, sea preciosa en tu vista!

¡He aquí que bajó fuego del cielo y consumió a los dos primeros capitanes de cincuenta, con sus cincuenta; sea pues ahora preciosa mi vida en tu vista!

Preciosa a los ojos de Jehová es la muerte de sus santos.

(porque la redención de su alma es costosa, y no se logrará jamás:)

Redimirá su alma del engaño y de la violencia, y la sangre de ellos será preciosa a sus ojos.

¶Entonces Faraón envió y llamó a Moisés y a Aarón, y les dijo: He pecado esta vez; Jehová es el justo, y yo y mi pueblo somos los inicuos.

Y respondió Balaam: Yo he pecado: golpeé la bestia porque no sabía que tú te habías apostado contra mí en el camino. Mas ahora si te parece mal, yo me volveré.

diciendo:  ¡Pequé, entregando sangre inocente! Mas ellos dijeron:  ¿Qué se nos da a nosotros? ¡viéraslo tú!

Y Samuel respondió a Saúl: Te has portado neciamente; no has aguardado el mandamiento de Jehová tu Dios que él te impuso; pues que ahora Jehová hubiera establecido tu reino sobre Israel para siempre.

¶Entonces dijo Saúl a Samuel: He pecado, traspasando el mandamiento de Jehová y tus palabras; porque temí al pueblo y obedecí la voz de ellos.

A lo que dijo Saúl: Yo he pecado: ahora empero te ruego que me honres delante de los ancianos de mi pueblo, y delante de Israel, y vuelvas conmigo para que adore a Jehová tu Dios.

¶Entonces salieron a campaña los príncipes de los Filisteos. Y fué así que siempre que ellos salían, David se manejaba con más prudencia que todos los siervos de Saúl; por lo cual se hizo de mucha estimación su nombre.

Dijo también a David: Más justo eres tú que yo; porque tú me has recompensado con el bien, en tanto que yo te he recompensado con el mal.

Entonces respondió David, diciendo: He ahí la lanza del rey; pase pues alguno de los mancebos, y la tome.

Y, he aquí, del modo que fué preciosa tu vida hoy a mis ojos, así sea preciosa mi vida a los ojos de Jehová; y ¡él me libre de toda adversidad!

Y fué dado aviso a Saúl de que se había refugiado David en Gat; de manera que no volvió más a buscarle.




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