Dijo además David a Ahimelec ¿Y no tienes aquí en tu poder alguna lanza o espada? que ni mi espada, ni otra arma alguna he traído conmigo, por cuanto era urgente la orden del rey.
Los correos pues, cabalgando en corceles y mulos, partieron, apremiados y urgidos por la orden del rey: y el edicto fué dado en Susán, ciudad metrópoli.
¶Mas estaba allí aquel mismo día un hombre de los siervos de Saúl, detenido delante de Jehová, cuyo nombre era Doeg, idumeo, jefe de los pastores que tenía Saúl.
Y dijo el sacerdote: He aquí la espada de Goliat el filisteo, a quien tú mataste en el Valle de Ela, envuelta en un paño, detrás del efod. Si quieres tomar ésa, tómala, que aquí no hay otra sino ésta. Y respondió David: Ninguna hay como ésta; dámela.
Y David respondió a Abiatar: Ya sabía yo aquel día en que estaba allí Doeg idumeo, que sin duda él lo denunciaría a Saúl. Yo he sido causa de la muerte de todas las personas de la casa de tu padre.
Entonces respondió Doeg idumeo (el cual estaba puesto sobre los siervos de Saúl), diciendo: Yo ví al hijo de Isaí que vino a Nob, a Ahimelec hijo de Ahitob,