Y preguntaron los hombres del lugar acerca de su mujer. Y él respondió: Mi hermana es; porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer; no sea que me maten (decía él) los hombres el lugar con motivo de Rebeca; pues era de hermoso parecer.
Por lo cual disfrazó su juicio delante de ellos, y fingióse loco entre sus manos, y borrajeaba las hojas de la puerta, y dejó correr la saliva por sus barbas.