¶Hizo pues Samuel lo que le había dicho Jehová, y fué a Bet-lehem. Y saliéronle a recibir los ancianos de la ciudad temblorosos; y le dijeron: ¿Es pacífica tu venida?
En cuanto a mí, cuando hube venido de Padán, se me murió Raquel en la tierra de Canaán, por el camino, faltando todavía algún trecho para llegar a Efrata; y la enterré allí en el camino de Efrata (la cual es Bet-lehem.)
Entonces ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo que ver contigo, oh varón de Dios? ¿has venido a mí para renovar la memoria de mi pecado, y para hacer morir a mi hijo?
Y aconteció que cuando Joram vió a Jehú, le dijo: ¿Hay paz, Jehú? A lo que él respondió: ¿Qué paz, mientras duren las fornicaciones de Jezabel, tu madre, y sus muchas hechicerías?
José, pues, subió de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Bet-lehem (por cuanto era de la casa y familia de David),
Y toda la muchedumbre de la región de los Gadarenos en derredor, le rogaron que se retirase de ellos; porque se había apoderado de ellos un gran temor: y subiendo en la barca, él se volvió.
ENTONCES vino David a Nob, a Ahimelec sumo sacerdote: mas Ahimelec recibió a David con sobresalto, y le dijo: ¿Por qué estás solo, y no vienen tus hombres contigo?