Y volviéndose Samuel para irse, asió Saúl de la falda de su manto, la cual rasgóse.
Y preguntóle: ¿Cuál es su forma? Y respondió la mujer: Un anciano sube, y está envuelto en un manto. Y conoció Saúl que era Samuel; por lo cual inclinóse rostro a tierra, y le hizo reverencia.