TOMÓ entonces Samuel una redoma de aceite, y derramólo sobre la cabeza de Saúl, y besándole, dijo: ¿No es por cuanto Jehová te ha ungido por príncipe sobre su herencia?
Entonces dijo Samuel a todo el pueblo: ¿Habéis mirado al que Jehová ha escogido, y visto que no hay ninguno semejante a él entre todo el pueblo? Y gritó todo el pueblo, diciendo: ¡Viva el rey!
Ahora pues, oye su voz; esto no obstante, protesta solemnemente contra ellos, y pon delante de ellos lo que será el uso del rey que va a reinar sobre ellos.