Y los hombres de Jabés respondieron a Nahás: Mañana saldremos a vosotros, para que hagáis con nosotros todo lo que bien os pareciere.
A lo que respondió el rey de Israel y dijo: Conforme a tu dicho, señor mío, oh rey, tuyo soy yo y cuanto tengo.
Entonces respondieron a los mensajeros que habían venido: Así diréis a los hombres de Jabés-galaad: Mañana, al calentar el sol, tendréis socorro. Fueron pues los mensajeros y se lo dijeron a los hombres de Jabés; y ellos se alegraron.