Porque para esto también a los muertos fué predicado el evangelio, a fin de que fuesen juzgados según los hombres en cuanto a la carne, mas viviesen según Dios en cuanto al espíritu.
A quienes fué revelado que no para sí mismos, sino para nosotros, ministraban estas cosas, que ahora os han sido anunciadas, por medio de los que os han predicado el evangelio, acompañado del Espíritu Santo enviado del cielo: cosas en las que los ángeles, con mirada fija, desean penetrar.
Porque Cristo también padeció por los pecados, una vez para siempre, el justo por los injustos, a fin de llevarnos a Dios, cuando fué muerto en cuanto a la carne, pero vivificado en cuanto al espíritu;
Y otro ángel salió de junto al altar, el cual tenía poder sobre el fuego; y clamó a gran voz a aquel que tenía la hoz aguda, diciendo: ¡Echa tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la viña de la tierra, porque sus uvas están maduras!