1 Pedro 3:5

Biblia Version Moderna (1929)

Porque de esta manera, también, en el antiguo tiempo, se ataviaban las santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus propios maridos.

Referencias Cruzadas

Proverbios 31:10

La mujer de acendrada virtud, ¿quién la puede hallar? pues que su valor supera mucho a los rubíes.

Proverbios 31:30

¡El favor es engañoso, y la hermosura es una vanidad; pero la mujer que teme a Jehová es la que será alabada!

Jeremías 49:11

¡Deja tus huérfanos, que yo les conservaré la vida, y esperen tus viudas en mí!

Lucas 2:37

y era viuda de hasta ochenta y cuatro años; la cual no se apartaba del Templo, sirviendo a Dios noche y día, en ayunos y oraciones.

Hechos 1:14

Todos éstos continuaban unánimes en la oración, con las mujeres, y con María madre de Jesús, y con los hermanos de él.

Hechos 9:36

¶Había también en Joppe cierta discípula llamada Tabita; nombre que, traducido al griego, se dice Dorcas: esta mujer era llena de buenas obras y de limosnas que hacía.

Efesios 5:33

Sin embargo, en cuanto a vosotros también, amad cada uno individualmente a su propia mujer como a sí mismo; y vea la mujer que reverencie a su marido.

1 Timoteo 2:10

sino antes (lo cual conviene a mujeres haciendo profesión de piedad), con buenas obras.

1 Timoteo 2:15

Sin embargo, ella se salvará engendrando hijos, perseverando ellas en fe y amor y santidad, con modestia.

1 Timoteo 5:10

teniendo buen testimonio en cuanto a buenas obras: si hubiere criado hijos, si hubiere hospedado a los extranjeros, si hubiere lavado los pies de los santos, si hubiere socorrido a los afligidos, si hubiere seguido estrictamente toda buena obra.

1 Timoteo 5:5

La que realmente es viuda, y desamparada, espera en Dios, y persevera en rogativas y en oraciones noche y día.

Hebreos 11:11

¶Por fe también Sara misma recibió poder de concebir un hijo, cuando ella había ya pasado la edad; puesto que tuvo por fiel a aquel que había hecho la promesa.

1 Pedro 1:3

¶Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, el cual, conforme a su grande misericordia, nos ha reengendrado para una esperanza viva, por medio de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos;

1 Samuel 2:1

ENTONCES Ana oró, y dijo: ¡Alégrase mi corazón en Jehová; mi cuerno se ha ensalzado en Jehová! ¡hase ensanchado mi boca sobre mis enemigos, por cuanto me regocijo en tu salvación!