Esa noche pasaré yo por el territorio de Egipto y mataré a todos los primogénitos de Egipto, tanto de los hombres como de los animales. Haré justicia de todos los dioses de Egipto. ¡Yo, el Señor!
Oráculo contra Egipto: Ved al Señor que, cabalgando sobre una nube ligera, viene a Egipto. Los ídolos de Egipto tiemblan ante él, y el corazón de los egipcios desfallece en su pecho.
El Señor será terrible contra ellos. Aniquilará a todos los dioses de la tierra; se prosternarán ante él, cada uno en su país, todas las islas de las naciones.
ya que mío es todo primogénito. El día en que hice morir a todos los primogénitos de Egipto consagré para mí a todos los primogénitos de Israel, tanto de hombres como de animales. Son míos. Yo, el Señor'.