Subieron hasta el valle de Escol y, después de haber visto la tierra, desanimaron a los israelitas para que no fuesen a la tierra que el Señor les daba.
Llegaron hasta el valle de Escol, donde cortaron un sarmiento con un racimo de uvas, lo colgaron de un palo y se lo llevaron entre dos. Recogieron también granadas e higos.
Se presentaron a Moisés, a Aarón y a toda la comunidad de los israelitas en el desierto de Farán, en Cades; les informaron detalladamente de todo, y les mostraron los productos de la tierra.