Pero yo os digo que el que se irrite con su hermano será llevado a juicio; el que insulte a su hermano será llevado ante el tribunal supremo, y el que lo injurie gravemente será llevado al fuego.
Ellos le respondieron: 'Hemos tenido un sueño y no hay quien nos lo interprete'. José les dijo: 'Es Dios quien da la interpretación; no obstante, contádmelo a mí'.
Yo estaré delante de ti, allí, en la roca de Horeb. Tú golpearás la roca, que manará agua, y el pueblo beberá'. Así lo hizo Moisés en presencia de los ancianos de Israel.