Cuando en el país haya hambre, peste, tizón, añublo, langosta o pulgón, si el enemigo los asedia en alguna de sus ciudades; en cualquier plaga o enfermedad,
Su fama se extendió por toda Siria. Le traían todos los que se sentían mal, aquejados de diversas enfermedades y sufrimientos, endemoniados, lunáticos y paralíticos, y los curaba.