Jesús les dijo: '¿Está permitido en sábado hacer el bien o el mal, salvar una vida o destruirla?'.
Jesús preguntó a los doctores de la ley y a los fariseos: '¿Está permitido curar en sábado o no?'.
Luego les dijo: '¿Está permitido en sábado hacer el bien o el mal, salvar una vida o destruirla?'. Ellos callaban.
Y se fueron a otra aldea.
Él, que conocía sus pensamientos, dijo al hombre de la mano seca: 'Levántate y ponte en medio'. Él se levantó y se puso.
Y mirando a todos los circundantes, le dijo: 'Extiende tu mano'. La extendió, y quedó sana.