Después de esto, salió, vio a un publicano, llamado Leví, sentado en la oficina de los impuestos, y le dijo: 'Sígueme'.
Andrés y Felipe; Bartolomé y Mateo; Tomás y Santiago, hijo de Alfeo; Tadeo y Simón el cananeo,
Felipe y Bartolomé; Tomás y Mateo el publicano; Santiago, el de Alfeo, y Tadeo;
Al día siguiente, Jesús decidió salir para Galilea; encontró a Felipe, y le dijo: 'Sígueme'.
El que quiera ponerse a mi servicio, que me siga, y donde esté yo allí estará también mi servidor. A quien me sirva, mi Padre lo honrará.
Al oírlo Jesús, le dijo: 'Aún te queda una cosa por hacer: Vende todo lo que tienes, dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después, ven y sígueme'.
Luego dijo a sus discípulos: 'El que quiera venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.
Jesús le dijo: 'Sígueme y deja que los muertos entierren a sus muertos'.