Uno de ellos, llamado Cleofás, respondió: '¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no sabes lo que ha sucedido en ella estos días?'.
Estaban en pie junto a la cruz de Jesús su madre, María de Cleofás, hermana de su madre, y María Magdalena.
Y les dijo: '¿De qué veníais hablando en el camino?'. Se detuvieron entristecidos.
Él les dijo: '¿Qué?'. Ellos le contestaron: 'Lo de Jesús de Nazaret, que fue un profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo,