Aquel día, el que esté en la terraza y tenga en la casa sus enseres, que no baje a recogerlos; el que esté en el campo, que no vuelva atrás a buscar nada.
Entonces los que estén en Judea que huyan a los montes, los que estén dentro de la ciudad que se alejen y los que estén en el campo que no entren en la ciudad.
¿Y tú andas buscando para ti cosas extraordinarias? No las busques, pues yo voy a mandar desventuras sobre todo mortal -dice el Señor-. A ti te concederé como botín la vida, dondequiera que vayas'.
Por esto os digo: No os angustiéis por vuestra vida, qué vais a comer; ni por vuestro cuerpo, qué vais a vestir. Porque la vida es más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido.