Animales acuáticos: podréis comer todos los que tienen aletas o escamas, sean de mar o de río.
Por el contrario, alguien dirá: 'Tú tienes la fe, y yo las obras. Muéstrame, si puedes, tu fe sin obras, y yo con mis obras te mostraré la fe'.
Si creemos en Cristo, da lo mismo estar o no estar circuncidados; lo que importa es la fe y que esta fe se exprese en obras de amor.
instando a judíos y griegos a convertirse a Dios y a la fe en Jesús nuestro Señor.
No comeréis sus carnes ni tocaréis sus cadáveres; los tendréis por impuros.
Todos los animales acuáticos, de mar o de río, serán impuros para vosotros si no tienen aletas o escamas.