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Referencias Cruzadas

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Jueces 4:3

Biblia Martin Nieto

Los israelitas clamaron al Señor, porque Yabín tenía novecientos carros de guerra y había oprimido a los israelitas durante veinte años.

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19 Referencias Cruzadas  

El Señor estaba con Judá, que conquistó la montaña; pero no pudo expulsar a los habitantes de la llanura, porque tenían carros de guerra.

fueron aplastados por sus enemigos y subyugados bajo su poder.

clamaron al Señor, y el Señor hizo surgir un libertador para salvarlos: Otoniel, hijo de Quenaz, hermano menor de Caleb.

Cuando él los mataba, ellos lo buscaban, se arrepentían y volvían hacia él;

invócame cuando estés angustiado; yo te libraré y tú deberás glorificarme'.

y dijeron a Samuel: 'No dejes de rogar por nosotros al Señor, nuestro Dios, para que él nos salve de los filisteos'.

Quitaron de en medio de ellos los dioses extranjeros y adoraron al Señor. Y él no pudo soportar por más tiempo la aflicción de Israel.

Se preferían dioses extranjeros; la guerra llegaba ya a las puertas; apenas se veía un escudo o una lanza entre los cuarenta mil de Israel.

Los israelitas clamaron al Señor, y el Señor hizo surgir un libertador: Ehud, hijo de Guerá, benjaminita, que era zurdo. Los israelitas le encargaron que llevase el tributo a Eglón, rey de Moab.

Los hijos de José replicaron: 'La montaña no nos basta; pero los cananeos que viven en la llanura tienen carros de hierro, lo mismo que los de Betsán y sus aldeas y los de la llanura de Yezrael'.

Un pueblo desconocido para ti comerá las cosechas de tu tierra y el fruto de todas tus fatigas, mientras tú serás siempre oprimido y aplastado.

de suerte que en pleno día andarás a tientas, como anda el ciego en las tinieblas, y no tendrás éxito en ninguna de tus empresas, sino que te verás siempre oprimido y despojado, sin que nadie te socorra.

Por aquel tiempo era juez en Israel Débora, profetisa, mujer de Lapidot.

reunió sus novecientos carros de hierro, y todas las tropas que tenía, desde Jaróset Goyín al arroyo Quisón.

Entretanto, y después de mucho tiempo, murió el rey de Egipto. Los israelitas, que seguían gimiendo bajo la dura esclavitud, clamaron, y su clamor, provocado por la esclavitud, subió hasta Dios.

Los israelitas se vieron reducidos a gran miseria por causa de Madián, y clamaron al Señor.

Los israelitas clamaron al Señor: 'Hemos pecado contra ti, porque hemos abandonado al Señor, nuestro Dios, para adorar a los Baales'.




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