Algún tiempo después, en los días de la siega del trigo, Sansón fue a ver a su mujer. Le llevaba un cabrito. Y dijo: 'Quiero entrar a ver a mi mujer en la alcoba'. Pero el suegro no le dejó entrar,
Él contestó a su padre: Hace ya tantos años que te sirvo sin desobedecer jamás tus órdenes, y nunca me has dado ni un cabrito para celebrar una fiesta con mis amigos.
En aquel entonces había gigantes en la tierra (y también después), cuando los hijos de Dios se unieron a las hijas de los hombres, y ellas les daban hijos. Éstos son los héroes de antaño, hombres famosos.