Uno de ellos, Nicodemo, que había ido a él anteriormente, les dijo:
Llegó también Nicodemo, aquel que anteriormente había estado con él por la noche, con unas cien libras de una mezcla de mirra y de áloe.
Esa gente que no conoce la ley son unos malditos'.
¿Quién defenderá mi causa contra los criminales, quién estará de mi parte contra los delincuentes?