Los judíos discutían entre ellos: '¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?'.
Estas palabras causaron una nueva división entre los judíos.
Algunos fariseos dijeron: 'Ése no puede ser un hombre de Dios, pues no guarda el sábado'. Otros decían: '¿Cómo puede hacer tales milagros un hombre pecador?'. Estaban divididos.
Los judíos criticaban a Jesús porque había dicho: 'Yo soy el pan que ha bajado del cielo',
El hombre mundano no acepta las cosas del Espíritu de Dios; son locura para él, y no puede entenderlas, ya que hay que juzgarlas espiritualmente.
Al oír hablar de la resurrección de los muertos, unos se burlaban y otros dijeron: 'Te oiremos sobre esto otra vez'.
La mujer le dijo: 'Señor, no tienes con qué sacarla y el pozo es profundo; ¿de dónde sacas esa agua viva?
Nicodemo preguntó: '¿Cómo puede ser eso?'.
Nicodemo le preguntó: '¿Cómo puede uno nacer de nuevo siendo viejo? ¿Es que puede volver al seno de su madre y nacer de nuevo?'.
Los judíos de Jerusalén enviaron sacerdotes y levitas a preguntar a Juan:
Muchos de sus discípulos, al oírlo, dijeron: 'Esto que dice es inadmisible. ¿Quién puede admitirlo?'.