Jesús respondió: 'Vete, tu hijo vive'. El hombre creyó en la palabra de Jesús y se fue.
Y Jesús dijo al oficial: 'Anda, y que suceda como has creído'. Y en aquella misma hora el criado se curó.
Al verlos, les dijo: 'Id a presentaros a los sacerdotes'. Y mientras iban, quedaron limpios.
Porque pensaba que Dios tiene poder incluso para resucitar a los muertos. Por eso recobró a su hijo. Esto es un símbolo para nosotros.
Jesús le respondió: '¿No te he dicho que, si crees, verás la gloria de Dios?'.
El oficial dijo: 'Señor, anda antes que muera mi hijito'.
Cuando iba de regreso, sus criados salieron a su encuentro y le dijeron: 'Tu hijo vive'.
La tinaja de harina no se vació, ni disminuyó la orza del aceite, según la promesa que el Señor había hecho por medio de Elías.