Desde entonces Pilato buscaba la manera de dejarlo en libertad. Pero los judíos gritaban: 'Si lo dejas en libertad, no eres amigo del césar; todo el que se hace rey va contra el césar'.
'Anda, reúne a todos los judíos de Susa, y ayunad por mi intención. No comáis ni bebáis durante tres días y tres noches. También yo, con mis doncellas, ayunaré. Luego me presentaré al rey, aun contra la ley, y si he de morir, moriré'.
Que el Dios todopoderoso haga que aquel hombre sea benévolo con vosotros y os deje traer libre al otro hermano vuestro y a Benjamín. En cuanto a mí, si he de verme privado de mis hijos, que así sea'.