También os negué la lluvia los tres meses antes de la siega, e hice llover sobre una ciudad y sobre otra no; en un campo llovió y otro campo se secó por falta de lluvia.
¿De quién tienes miedo, a quién temes, para haber renegado así de mí, sin acordarte más de mí, ni llevarme en tu corazón? Yo me callaba, cerraba los ojos; por eso no temías.
Muchos judíos leyeron la inscripción, porque donde Jesús fue crucificado era un sitio cercano a la ciudad; y estaba escrito en hebreo, en latín y en griego.