No temas, pues no tendrás ya que avergonzarte; no te sonrojes, pues no serás ya confundida; olvidarás la afrenta de tu juventud y no te acordarás del oprobio de tu viudez.
El azote que viene del norte lo alejaré de vosotros y lo guiaré hacia una tierra árida y desolada: su vanguardia hacia el mar oriental, y hacia el mar occidental su retaguardia. Y subirá su mal olor y subirá su fetidez; sí, él ha hecho grandes cosas'.
'Pregunta a los tiempos pasados que te han precedido desde el día en que Dios creó al hombre sobre la tierra. ¿Desde uno a otro extremo del cielo se ha visto jamás cosa tan grande o se ha oído cosa semejante?
Después de todo esto, la palabra del Señor fue dirigida a Abrán en una visión. Dijo: 'No temas, Abrán, yo soy tu escudo. Tu recompensa será muy grande'.
Gritad de gozo, cielos, porque el Señor lo ha hecho; alegraos, honduras de la tierra; lanzad gritos de júbilo, montañas, y tú, bosque, con todos tus árboles, porque el Señor ha redimido a Jacob y ha manifestado su gloria en Israel.
Sí, partiréis con alegría y en paz seréis llevados; montes y colinas prorrumpirán ante vosotros en gritos de alegría, y todos los árboles del campo aplaudirán.
Comeréis hasta hartaros, y alabaréis el nombre del Señor, vuestro Dios, que ha obrado con vosotros maravillas. Nunca más mi pueblo será cubierto de vergüenza.