Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Jeremías 38:2

Biblia Martin Nieto

'Esto dice el Señor: El que se quede en la ciudad morirá a espada, de hambre y de peste; pero el que se entregue a los caldeos vivirá. Su propia vida será su botín; sí, vivirá.

Ver Capítulo Copiar

20 Referencias Cruzadas  

Sí, te salvaré. No caerás a espada, sino que la salvación de tu vida será tu botín, por haber puesto tu confianza en mí' -dice el Señor-.

¿Y tú andas buscando para ti cosas extraordinarias? No las busques, pues yo voy a mandar desventuras sobre todo mortal -dice el Señor-. A ti te concederé como botín la vida, dondequiera que vayas'.

Por tanto, esto dice el Señor: Vosotros no me habéis escuchado, concediendo cada uno la libertad a su propio hermano, a su prójimo. Pues bien, yo también - dice el Señor- voy a proclamar contra vosotros la libertad de la espada, la peste y el hambre. Os convertiré en objeto de horror para todos los reinos de la tierra.

Esto dice el Señor Dios: 'Cuando yo mande contra Jerusalén estos cuatro azotes: espada, hambre, animales feroces y peste para exterminar de ella hombres y animales,

Sí, todos aquellos que se obstinen en marchar a Egipto para vivir allí morirán a espada, de hambre y de peste; ninguno de ellos sobrevivirá, ninguno podrá escapar a la desgracia que yo mandaré sobre ellos.

Está fuera la espada; la peste y el hambre dentro; el que se encuentre en el campo caerá de hambre y peste.

Esto dice el Señor Dios: 'Bate las manos, patalea y grita ¡Ay! por todas las horribles acciones de la casa de Israel, que va a caer por la espada, el hambre y la peste.

Castigaré a los que viven en Egipto, como castigué a Jerusalén, con la espada, el hambre y la peste.

Por tanto, sabed bien que moriréis a espada, de hambre y de peste en el lugar a donde queréis ir a vivir'.

Los perseguiré con la espada, el hambre y la peste; los dejaré hechos un horror para todos los reinos de la tierra, maldición, espanto, escarnio y oprobio de todas las naciones en que los dispersé,

¿Por qué tú y tu pueblo queréis exponeros a morir a espada, de hambre y de peste, como ha anunciado el Señor a la nación que se niegue a someterse al rey de Babilonia?

Y les daré inteligencia para que conozcan que yo soy el Señor; ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios, porque se convertirán a mí de todo corazón.

Esto dice el Señor, Dios de Israel: Yo haré volver atrás las armas que lleváis en vuestras manos y con las cuales combatís fuera de las murallas contra el rey de Babilonia y los caldeos que os tienen asediados, y las amontonaré en medio de esta ciudad.

Pero a la nación que doble el cuello bajo el yugo del rey de Babilonia y se someta a él, yo la dejaré en paz en su tierra -dice el Señor-, la cultivará y vivirá en ella'.

Pues bien, esto dice el Señor acerca del rey que se sienta en el trono de David y de todo el pueblo que habita esta ciudad, hermanos vuestros que no fueron deportados como vosotros.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios