Palabra que el Señor dirigió a Jeremías:
Derrama tu furor sobre las naciones que no te conocen, sobre los pueblos que tu nombre no invocan, porque han devorado a Jacob, lo han consumido y han devastado su morada.
'Escucha las cláusulas y repítelas a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén.
El Señor le dijo: