Entonces Judá dijo a su padre, Israel: 'Deja venir conmigo al muchacho; salgamos inmediatamente, si queremos vivir y no morir nosotros, tú y nuestros hijos.
Por entonces cayó mortalmente enfermo Ezequías. El profeta Isaías, hijo de Amós, vino a decirle: 'Esto dice el Señor: Pon en orden las cosas de tu casa, porque vas a morir y no sanarás'.