El primer panadero vio que había sido una interpretación favorable y dijo a José: 'Yo he soñado que llevaba tres canastillos de dulces sobre mi cabeza.
Pues la verdad es que fui arrebatado del país de los hebreos y aquí tampoco he hecho nada para que se me meta en la cárcel'.
En el canastillo de encima había de todo lo que come el Faraón en cosa de repostería, pero los pájaros se lo comían'.