Labán se levantó de madrugada, besó a sus nietos y a sus hijas, los bendijo y regresó a su lugar.
pues él ordenó a sus santos ángeles que te guardaran en todos tus caminos;
llegando a ser superior a los ángeles en la medida en que los aventaja el nombre que ha recibido en herencia.
Así, de ahora en adelante, por medio de la Iglesia, los principados y potestades celestiales podrán conocer la incalculable sabiduría de Dios,
Pablo, Apolo, Cefas, el mundo, la vida, la muerte, el presente y el futuro, todo es vuestro;
Un mísero gritó: el Señor lo escuchó y lo libró de todas sus angustias;
En cuanto terminó de hablar con Abrahán, el Señor se fue y Abrahán volvió a su lugar.
Y bendijeron a Rebeca diciendo: 'Tú eres nuestra hermana; ¡crece en millares de millares! ¡Que tu descendencia ocupe la puerta de sus enemigos!'.
Y tú ni siquiera me has permitido besar a mis hijas y a mis nietos. Has obrado como un insensato.