Y Dios le dijo: 'Yo soy el Dios todopoderoso; sé fecundo y multiplícate. Un pueblo, un conjunto de naciones procederá de ti, y reyes saldrán de tus lomos.
Dios los bendijo y les dijo: 'Sed fecundos y multiplicaos, poblad la tierra y sometedla; dominad sobre los peces del mar, las aves del cielo y cuantos animales se mueven sobre la tierra'.
Que el Dios todopoderoso haga que aquel hombre sea benévolo con vosotros y os deje traer libre al otro hermano vuestro y a Benjamín. En cuanto a mí, si he de verme privado de mis hijos, que así sea'.
En cuanto a Ismael, también te he escuchado. Yo le bendigo: Le haré fecundo y le multiplicaré inmensamente, engendrará doce príncipes, y yo haré de él un gran pueblo.
Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y le daré todas estas tierras, y en tu descendencia serán benditas todas las naciones de la tierra;
Y aquella misma noche se le apareció el Señor y le dijo: 'Yo soy el Dios de tu padre Abrahán. No temas, porque yo estoy contigo. Te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia por amor de Abrahán, mi siervo'.
Isaac sintió un fuerte estremecimiento y dijo: '¿Pues quién ha sido el que me ha traído la caza? Yo he comido de ella antes de que tú vinieras, y lo he bendecido, y ¡bendito será!'.
El Dios de tu padre te ayuda, el todopoderoso te bendice: bendiciones que bajan del cielo, bendiciones que suben del abismo, bendiciones de pechos y seno,
Los israelitas, muy fecundos, se multiplicaron sobremanera, aumentando progresivamente y llegando a ser tan numerosos que llenaron toda aquella región.