Uno de ellos prosiguió: 'Dentro de un año volveré. Para entonces, tu mujer, Sara, habrá tenido un hijo'. Sara escuchaba a la entrada de la tienda, detrás del que hablaba.
Y Dios le dijo: 'Ciertamente Sara, tu mujer, te dará un hijo, y tú le llamarás Isaac. Yo estableceré con él mi pacto, como un pacto perpetuo para su descendencia después de él.
Luego dijo a sus hermanos: 'Yo voy a morir, pero Dios vendrá ciertamente en vuestra ayuda y os hará subir de esta tierra a la tierra que él prometió a Abrahán, Isaac y Jacob'.
No te postrarás ante ella ni le darás culto, porque yo, el Señor, tu Dios, soy un Dios celoso, que castigo la iniquidad del padre en los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,
'Anda, reúne a los ancianos de Israel y diles: El Señor, Dios de vuestros padres, el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob, se me ha aparecido y me ha dicho: Os he visitado y he visto lo que se os hace en Egipto.
y te echarán al suelo. Matarán a todos tus habitantes y no dejarán de ti piedra sobre piedra, porque no has conocido el tiempo en el que Dios te ha visitado'.