oró así: 'Señor, Dios de nuestros padres, tú eres el Dios de los cielos, tú gobiernas los reinos de la tierra, tú tienes en tu mano la fuerza y el poder; nadie puede resistirte.
Dios los bendijo y les dijo: 'Sed fecundos y multiplicaos, poblad la tierra y sometedla; dominad sobre los peces del mar, las aves del cielo y cuantos animales se mueven sobre la tierra'.
Juan, a las siete Iglesias de Asia: a vosotros la gracia y la paz de parte del que es, el que era y el que viene, y de parte de los siete espíritus que están delante de su trono;