Te tengo siempre presente en mis oraciones y doy gracias a Dios,
En primer lugar doy gracias a mi Dios, por medio de Jesucristo, por todos vosotros, porque vuestra fe es conocida en todo el mundo.
no ceso de dar gracias por vosotros recordándoos en mis oraciones,
Doy gracias a Dios, a quien sirvo, como mis antepasados, con conciencia limpia, y te tengo presente en mis oraciones día y noche.
Hermanos, es nuestro deber y es de justicia dar gracias a Dios por vosotros, por los grandes progresos de vuestra fe y por el amor cada vez más grande que os tenéis unos a otros,
Continuamente damos gracias a Dios por todos vosotros y os recordamos en nuestras oraciones.
Damos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, orando siempre por vosotros,
Siempre que me acuerdo de vosotros doy gracias a mi Dios;
al oír hablar del amor y de la fe que profesas a Jesús, el Señor, y a todo el pueblo de Dios.