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Referencias Cruzadas

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Éxodo 4:22

Biblia Martin Nieto

Tú dirás al Faraón: Esto dice el Señor: Israel es mi hijo primogénito.

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17 Referencias Cruzadas  

Cuando Israel era niño, yo le amaba, y de Egipto llamé a mi hijo.

son los israelitas, a los que Dios adoptó como hijos y a los que se apareció gloriosamente; de ellos es la alianza, la ley, el culto y las promesas;

a la congregación de los primogénitos que están escritos en los cielos, a Dios, juez universal, y a los espíritus de los justos, que han sido hechos perfectos,

Entre lágrimas habían partido, entre consuelos los devuelvo junto a los arroyos de las aguas, por un camino llano, donde no dan traspiés. Pues soy un padre para Israel, Efraín es mi primogénito.

No te irrites sin medida, Señor, no recuerdes siempre nuestras culpas. Pues, mira, tu pueblo somos todos nosotros.

porque tú eres nuestro padre! Pues Abrahán no nos conoce, ni Israel se acuerda de nosotros. Tú, Señor, eres nuestro padre; nuestro libertador es tu nombre desde antiguo.

Vosotros sois los hijos del Señor, vuestro Dios. No os haréis cortaduras ni os raparéis el pelo de la frente por un muerto.

Él nos ha engendrado según su voluntad por la palabra de la verdad, para que seamos como las primicias de sus criaturas.

seré para vosotros Padre, y vosotros seréis para mí hijos e hijas, dice el Señor todopoderoso.

y estuvo allí hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por medio del profeta: 'De Egipto llamé a mi hijo'.

'Anda, di al Faraón, rey de Egipto, que deje salir de su país a los israelitas'.

y le dirás: El Señor, Dios de los hebreos, me ha enviado para decirte: Deja ir a mi pueblo para que me sirva en el desierto, pero hasta ahora no has querido escuchar. Ahora dice el Señor:

Él me llamará: 'Padre mío, Dios mío, mi roca salvadora';

¿Así pagáis al Señor, / pueblo insensato y necio? / ¿No es él tu padre y tu creador? / ¿No es él el que te hizo y te constituyó?

¿Es acaso Israel un esclavo, un siervo nacido en casa, para que se convirtiese en presa?

El hijo honra a su padre, el siervo honra a su señor. Pues si yo soy padre, ¿dónde está el honor que me pertenece? Y si soy señor, ¿dónde el respeto que se me debe?, dice el Señor todopoderoso justamente a vosotros, sacerdotes, que mientras despreciáis mi nombre, todavía decís: ¿En qué hemos despreciado tu nombre?




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