La hija del Faraón bajó a bañarse al río mientras sus doncellas paseaban por la orilla. Al ver la cesta en medio de los juncos, mandó a una de sus doncellas a recogerla.
El Señor lo hizo así, y enjambres de tábanos invadieron la casa del Faraón y las de sus servidores; en todo Egipto la tierra quedó infestada de tábanos.
Preséntate al Faraón de mañana; cuando salga del baño, te haces el encontradizo con él a la orilla del río teniendo en la mano el bastón que se convirtió en serpiente,